-Me gustaría poder hablar como tú. Todo lo que dices, las palabras que eliges... son perfectas. Siempre encuentras la cita adecuada o la frase correcta para que yo pueda creer que me quieres. Si no puedo convencerte de que nunca te abandonaré...
-Repítelo, simplemente.
-Nunca te abandonaré.
No hay comentarios:
Publicar un comentario