Capitulo 16:
Mi madre le da dos besos y mi padre
le estrecha la mano. Nos sentamos en la mesa de la cocina. Mi madre le ofrece
algo de desayunar pero él se niega. Sé que se muere de hambre, pero no quiere
molestar. Me lo conozco. Empezamos a hablar, hasta que llega el peor momento,
las preguntas de mi padre. Prepárate Travis… - Pienso.
-Bueno, ¿y cuántos años tienes?
Porque pareces un poco más mayor que _____…
-Tengo 17. – Responde.
Mis padres se miran. Sé que la edad
les importa pero a mí no. Mi padre le hace una mirada a mi madre y ella saca
otro tema de conversación.
-¿Y vives muy lejos de aquí?
-No, no mucho… En moto estoy a cinco
minutos.
Vale, ahora sí que la hemos cagado.
Mi padre odia las motos. Las odia a muerte. Y eso sí que no lo soporta.
-Papá…
-¿En moto? – Le pregunta un poco
enfadado, aunque intentando controlarse.
-Sí… - Responde Travis - Pasa algo,
¿señor?
Me tapo la cara con las manos, preocupada. Sé cómo
puede saltar mi padre, sé cómo puede ser. Intento tranquilizarme pero no puedo.
Estoy muy nerviosa. Mi padre mira a mi madre y ella le dice que no pasa
nada.
-Papá, no quieras decir lo que pienso
que vas a decir. Te lo pido por favor… Tú mismo ibas en moto cuando fuiste
joven.
-Y acabé sufriendo un accidente.
-¡Porque ibas borracho!
-No grites. – Me dice mi madre.
-No la vuelvas a llevar en moto,
¿entendido? – Advierte mi padre a Travis.
Travis no sabe que contestar. Asiente
con la cabeza, preocupado. Me mira pero yo no. Tengo la vista fija en mi padre.
A mí me gusta ir en moto, no le veo el problema y más si quién conduce es él.
Confío en él, me siento protegida, ¿Por qué mi padre no lo puede entender?
-Papá, mira, a mi me gusta ir en
moto. Que a ti, ¿no? Pues perfecto. Aquí la que tiene que ir en moto soy yo,
¿no? Pues ya está. Si me tengo que romper una pierna, me la rompo papá. Si
canto, será por él. Aunque no esté. No por vosotros, ya os lo he dicho antes.
Con vosotros allí, igualmente, me siento ridícula. Sé que ir en moto, puede ser
peligroso. Pero, ¿acaso tú no has ido en una? ¿No has sido joven? ¿No te has
enamorado nunca? Pues déjame vivir mi vida, con él, pero déjame hacer lo que
creo que es mejor. Que efectivamente, es estar con él.
Mi padre se calla y nosotros
abandonamos el piso. No he mirado a Travis en ningún momento. Aunque al llegar
abajo, al estar frente a la moto, él me mira. Ve mis ojos manchados de lágrimas
y rápidamente me abraza.
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